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miércoles, 2 de mayo de 2018

Un cachorrito de tigre deambula por México

Por javier10miniet

Ha recorrido la web: Se conoce que tres hombres cruzaron la frontera sur de los Estados Unidos hacia Texas con una bolsa de lona negra, en una aparente misión para entregar su lucrativo producto a los Estados Unidos. Pero se enteraron de los agentes fronterizos cercanos, preparándose para interceptarlos cerca de Brownsville, dijeron las autoridades.

Esto llevó a un cálculo: ¿ahora qué? ¿Y qué hacer con el cachorro de tigre inconsciente que pesa sobre la bolsa de lona? Los hombres se retiraron a México, y el cachorro de 3 o 4 meses de edad se convirtió en una sala inesperada de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los EE. UU. Así lo cuenta el Washintong Post.

Algunas declaraciones: "No es un día promedio en el campo", dijo Irma Chapa, vocera del sector de CBP del Valle del Río Grande, en un tweet el lunes. Chapa dijo que "se espera que el cachorro de tigre se recupere por completo", y la afiliada de CBS, KHOU, informó que el cachorro fue llevado al Zoológico Gladys Porter de Brownsville.

Afortunadamente para el tigre, el zoológico se especializa en el manejo de especies en peligro de extinción. El zoológico no devolvió inmediatamente una solicitud de comentarios. Los oficiales del CBP y del zoológico no identificaron la especie del cachorro de tigre. El cachorro era un nodo aparente en el comercio multimillonario de contrabando de animales, y en desafortunada compañía reciente: un tigre cachorro comprado por un adolescente estadounidense fue interceptado en un puesto de control en California el verano pasado.

En 2010, los agentes fronterizos recuperaron un tigre enjaulado y abandonado en Laredo, otra ciudad fronteriza de Texas. Alrededor de 350 millones de plantas y animales se venden en todo el mundo anualmente, generando entre $ 7 mil millones y $ 23 mil millones, dijo en un informe de 2015 el grupo de conservación Defenders of Wildlife, con sede en Washington. América Latina se ha convertido en un punto de apoyo en el comercio de especies exóticas y en peligro de extinción que alimenta el floreciente mercado de los EE. UU., dijo la asesora internacional senior del grupo, Alejandra Goyenechea, a The Washington Post.

Una cuarta parte de los 50,000 animales y productos de la vida silvestre incautados en los puertos de entrada de Estados Unidos desde 2005 hasta 2014 se originaron en América Latina, el grupo se encuentra en el informe en coautoría de Goyenechea. Los contrabandistas se mueven libremente a través de naciones plagadas de corrupción y explotan la frontera a veces porosa con México para enviar animales en peligro de extinción y productos animales ilegales a los Estados Unidos. Y tienden a usar rutas comerciales ya atravesadas por narcotraficantes, armas y contrabandistas de personas, una especie de autopista de actividad ilegal.

Pero dos circunstancias adicionales hacen de la región una tormenta perfecta para la caza furtiva de animales exóticos, dijo. Brasil, México y Colombia se encuentran entre las naciones con mayor biodiversidad en el mundo, proporcionando un puente terrestre ininterrumpido para el tráfico de animales exóticos desde esos ecosistemas frágiles hasta los Estados Unidos. Y cuando llegan, los traficantes a veces pueden superar a los agentes federales.

De los 328 puertos de entrada en los Estados Unidos, 64 son atendidos por funcionarios del Servicio de Pesca y Vida Silvestre. Y de esos, solo 18 sitios tienen agentes enfocados en la vida silvestre a tiempo completo, dijo ella. Se ha informado que cerca de 55,000 animales fueron incautados en los puertos de entrada desde 2005 hasta 2014, con un número desconocido que llegó a los Estados Unidos sin ser detectado, dijo.

Conchas de caracol que albergan caracoles, apreciados por los cocineros de mariscos pero sujetos a prohibiciones de pesca en Florida, son las especies más comúnmente contrabandeadas de América Latina, encontró Defenders of Wildlife. Tortugas marinas e iguanas también son tratadas en grandes cantidades, con caimanes y cocodrilos de contrabando y desollados para botas y cuero de cinturones. "Hay una demanda de botas de piel exóticas, y cuanto más exóticas, más gente las quiere", dijo a National Geographic el año pasado Nicholas Chávez, agente especial de la región suroeste del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos. Y los loros mexicanos están en peligro debido a la demanda de aves protegidas y raras, como las especies de colores vivos con frente anaranjado y cabeza amarilla.

Muchos contrabandistas confían en métodos menos llamativos que las bolsas de lona negras que se transportan a mano. En marzo pasado, agentes federales interceptaron un cargamento de cobras escondidas en latas de papas fritas. Si bien los métodos de embutir animales en contenedores y equipaje pueden ser útiles para los contrabandistas, el confinamiento es peligroso, dijo Goyenechea.

Muchos animales mueren en tránsito por asfixia o hambre, y otros se lesionan. Eso no está perdido en los contrabandistas. Los comerciantes recolectarán en un factor de 3, 5 o incluso 10 a 1 porque se espera que algunos de los animales perezcan en el camino, dijo ella. "Es una amenaza adicional para la vida silvestre", dijo Goyenechea. Lamentables noticias como estas llegan a diario. Personas sin escrúpulos que trafican con animales y otros seres vivos como si se tratase de objetos.