Un rescate verde es lo que promete Mariana Boy
La candidata del Partido Verde al Gobierno de la Ciudad de México, Mariana Boy Tamborrell, dio su palabra de hacer todo lo posible para recuperar las barrancas en la delegación Álvaro Obregón, pese a que la mayoría en estos momentos están en terribles condiciones y dándole lugar a un sinnúmero de focos de infección, lo que constituye un riesgo para la higiene y sanidad de los pobladores.
En medio de algunas averiguaciones efectuadas por la presa Becerra en el área de Nicanor Arvide, de ese territorio, la aspirante ecologista le brindó a los residentes aumentar la cifra de camiones de basura, colocar contenedores para el acopio de desechos sólidos, drenar el agua interrumpida y conjuntamente de optimizar la guardia en la zona. Mariana Boy recalcó la trascendencia ambiental que les proporcionan las barrancas porque almacenan distintas variedades de flora y fauna campestre; reservan partículas estancadas; absorben agua para el aumento de acuíferos; constan con una amplia representación de las áreas verdes, entre otros provechos.
Al mismo tiempo, Mariana, la ecologista mostró a los vecinos su oferta para la reconquista de estos suelos y su significado de disponer con un programa de educación ambiental general y a su vez anunció que lo primero que hará nada más que sea electa y alcance la jefatura de gobierno le dará cumplimiento a una campaña de concientización para recuperar estos espacios e impedir a toda costa que se almacene basura y otros residuos. “Las barrancas simbolizan un potencial ambiental muy trascendente para la Ciudad y es preciso su sustento y salvamento.”
Finalmente, la diputada alarmó del riesgo que constituye para varias familias residir en zonas de barrancas, principalmente en la temporada de lluvias puesto que el suelo se ablanda y aumenta el peligro de deslaves; al mismo tiempo de que los ríos o presas se esparcen debido a las grandes toneladas de basura que cubren los barrancos. Esto podría ocasionar pérdidas humanas y materiales, a causa de su convivencia en estos lugares. Deberían de ser zonas vedadas para la residencia de habitantes y solo convendría emplear estas tierras en cultivos, para sacarle provecho a su prospera flora y fauna, todo esto después de erradicar el mal de la suciedad que existe hoy en día aflora en este territorio.
