La mita de México ha elegido a AMLO
La expectativa creada en torno a las elecciones de México ha sido grande. Meses de debates electorales, mítines y eslóganes a través de las redes sociales han desembocado en un fin de semana que muchos han calificado de histórico. No solo por el resultado, que también, sino por la importancia de estos comicios: no solo se ha escogido al sucesor de Enrique Peña Nieto, sino también un sinnúmero de cargos federales y locales: alcaldes, gobernadores, concejales, regidores, juntas municipales, sindicaturas, senadores y diputados federales y locales. Más de 18.300 puestos públicos en juego.
En cuanto al resultado, las encuestas no iban mal encaminadas. AMLO es, ya mismo, presidente electo de la nación azteca y ninguno de sus cuatro perseguidores ha podido siquiera hacerle un poco de sombra. López Obrador ha logrado el apoyo del 53% de la población, convirtiéndose así en el primer presidente electo de izquierdas. Sus otros intentos de asaltar la presidencia tuvieron un pobre resultado, pero en esta campaña se ha colgado la medalla.
El segundo en el podio ha sido el candidato del PAN, Ricardo Anaya, lo que ha dejado a Meade, del PRI, en tercer puesto. El segundo ha recibido algo más de un 22% del apoyo, mientras que el tercero se ha quedado con un 15,4%. Por detrás de ellos están Calderón, con un 5,5% de los votos, y Zalava, con un 0,1% de apoyo.
AMLO ha ganado, sí, pero ahora le queda la parte más difícil: conseguir erradicar de México todas las lacras que atenazan a la sociedad, especialmente la violencia. Si hay algo que ha marcado esta intensa campaña es la cruel violencia que han vivido decenas de candidatos políticos. Los que tuvieron más suerte retiraron sus candidaturas a tiempo, pero muchos de ellos se han quedado por el camino. Se estima que más de 110 líderes han muerto a manos del crimen organizado en México desde el 30 de marzo, cuando se inició la campaña.
