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jueves, 17 de mayo de 2018

Luis Ángel Bravo, en búsqueda y captura

Por Maritrini

Este domingo se ha iniciado la búsqueda y captura para el exfiscal Luis Ángel Bravo, a quien se le inculpa por su colaboración en la desaparición forzosa de 13 personas cuando este ejercía su puesto como funcionario público en el Gobierno de Javier Duarte. La compensación será de cinco millones de pesos que equivalen a 258.000 dólares para la persona que brinde la información necesaria y suficiente para acceder a apresar este bandido.

El antiguo letrado del Estado resulta en este momento el principal objetivo para sus compañeros. Miguel Ángel Yunes, el gobernador de Veracruz, ha afirmado que Bravo interceptó las averiguaciones del descubrimiento de 19 cuerpos en un hoyo en el mes de enero del año 2016. El exfiscal les exigió a los oficiales a su cargo que justificaran solo el hallazgo de seis personas y que escondieran al resto de los cadáveres. “Contribuyó a que los culpables esquivaran la justicia”, ha avisado Yunes a la prensa local. El lugar en donde fueron encontrados los cuerpos, según el relato del gobernador, se utilizaba comúnmente por las autoridades estatales para ocultar a las víctimas de sus infracciones.

La desaparición obligada en Veracruz alcanzó a ser consecuente en el periodo del gobierno de Javier Duarte (2010-2016). La Fiscalía ha investigado recientemente que en los homicidios y raptos habían estado implicados varios de los suyos. En el mes de febrero, un juez decretó la aprehensión de 31 personas, todos ellos empleados de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz. Los casi 3.600 casos de evaporados y las 400 fosas encontradas en la zona habrían sucedido a la vista de Bravo. Tres de sus cómplices también se encuentran en estos momentos en búsqueda y captura.

La retirada de Bravo de su cargo en la Fiscalía sucedió sin que nadie hiciera fijación alguna sobre él. El 1ro de diciembre del año 2016, el exfiscal mostró después de dos años en el cargo su dimisión, eso sucedió a pesar de que él había sido designado por un periodo de nueve años y salió por la entrada principal. “llevaré conmigo en lo más profundo de mi corazón el placer de haber ofrecido mis servicios, en la medida de mi facultad, a todos aquellos que estuvieron presentes en la Fiscalía solicitando justicia; de ahí que no escondo nada, ni nada que me abochorne”, indicó en aquel tiempo en su despedida. En agosto del año 2015, interrogado por medios de prensa sobre el impresionante aumento de homicidios de periodistas en Veracruz, Bravo confesó que el Gobierno y la prensa coexistían en aquel momento con aprieto. “En varias ocasiones esa presión (de la prensa) concibe que el funcionario descubra algo que terminantemente pueda significar algo en una sentencia judicial no tan propicia a la humanidad”, señaló.

En octubre del año 2016, dos meses antes de la dimisión de Bravo, Javier Duarte, el exgobernador se dio a la fuga después de que un juez decretara su aprehensión por operaciones con riquezas de origen ilegal y las infracciones de delincuencia instituida. Los mandos prometieron en aquel tiempo 750.000 dólares de premio e iniciaron una búsqueda que los llevó hasta Guatemala, donde arrestaron al exgobernador seis largos meses. El derrumbe del ambiente de Duarte le dio lugar al descubrimiento de los sucesos más inhumanos de su Gobierno.