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miércoles, 2 de mayo de 2018

Un trasplante exitoso

Por Darío E.

Se trata de la operación practicada a un exsoldado que perdió buena parte del tejido del vientre y toda la zona genital. El pene, el escroto y la pared de la zona pélvica fueron trasplantadas de un donante fallecido al joven, que ha preferido mantenerse en el anonimato, en un hospital estadounidense.

Que un soldado pise una mina o una bomba abandonada en el campo de batalla es una historia más que cotidiana que a veces ni se refleja en los medios. Pero que el soldado pierda el vientre, y toda la zona genital, y luego de la amarga experiencia surja una esperanza de trasplante para él es realmente una noticia digna de contar.

Esa fue la historia de un joven estadounidense que ha preferido permanecer en el anonimato, luego de que un valiente grupo de especialistas de la universidad John Hopkins haya decidido asistirlo en recuperar su vida sexual a través de una complejísima intervención.

“Cuando me desperté por primera vez, finalmente me sentí más normal, como si ahora sí me encontrara bien”, dijo a la prensa luego de la operación, que duró 14 horas y demandó la participación de once cirujanos de experiencia.

Los tejidos y el pene trasplantado fueron adquiridos de un donante fallecido y según el doctor Andrew Lee, jefe del equipo de trabajo y de Cirugía Plástica y reconstructiva del hospital John hopkins, deberá recuperar su función sexual dentro de poco.

Pero además del pene, los doctores trasplantaron al paciente un escroto y parte de la pared abdominal, zona que había quedado totalmente destruida por la explosión.

La diferencia entre este trasplante total de pene y las operaciones de reconstrucción es que en aquellas es imposible recuperar la función sexual, mientras para este joven todavía hay esperanza gracias al arrojo de los médicos a implicarse en una intervención verdaderamente revolucionaria.

El hospital estadounidense donde se llevó a cabo este altotrasplante compuesto (que incluyó piel, huesos, músculos, tendones, y vasos sanguíneos) posee un programa de Trasplante Genital enfocado en casos postraumáticos que ha ayudado a numerosas víctimas de accidentes como este a recuperarse física y psicológicamente. Al decir del doctor Andrew Lee este tipo de heridas ocultas son menos visibles que la pérdida de extremidades, pero causan un trauma y problemas de autoestima en los aquejados que dejan huellas traumáticas profundas.