Tecnologías versus delito
Del mismo modo en que hoy se usan para afianzar la seguridad en otros ámbitos de la vida, un experto mexicano sugiere el empleo de tecnologías como la autenticación de las huellas dactilares, el lector de rostro o identificador de voz para disminuir el robo de información en las redes sociales.
Víctor González García, especialista del Instituto Politécnico Nacional (IPN) e integrante de la Red de Colaboración de Especialistas en Calidad (Redeca), perteneciente a la Unidad Politécnica para el Desarrollo y la Competitividad Empresarial (UPDCE) del IPN, resaltó que cuando solo se usan contraseñas hay una mayor posibilidad de que estas sean descubiertas por los delincuentes cibernéticos a través de diferentes algoritmos y, por tanto, que tengan acceso a nuestra información personal en estos espacios digitales.
El especialista refirió que las personas aún no toman conciencia de los riesgos a los que están expuestos a través del uso cotidiano de las redes sociales, correo electrónico etc., y continúan enviando información sensible mediante estas vías, tales como cuentas de banco, claves de acceso, direcciones, teléfonos o fotografías.
Cualquier persona de cualquier edad está expuesta a que le roben su información, alertaba e insistía en el cuidado que debía tener la población al subir datos personales en redes sociales, pues existen grupos delictivos especializados en el robo de información para luego realizar fraudes financieros o suplantación de identidad, además de que se extraen fotos o conversaciones privadas para comercializarlas con fines de extorsión.
Las cifras de las personas que potencialmente pueden ser víctimas, de acuerdo con González García, son las mismas que la cantidad de usuarios de internet en México, que asciende a aproximadamente 70 millones de personas, de las cuales 83 por ciento hace uso de alguna o varias redes sociales. Entre los públicos más asiduos a estos espacios se encuentran los jóvenes entre los 12 a 34 años de edad, de ahí que ese grupo sea el más vulnerable ante estos delitos.
Entre las recomendaciones que brinda el experto se halla la de no difundir datos que hagan notar las actividades cotidianas, sitios de trabajo o vivienda, estatus económico o los lugares que se visitan. Además, recordó que aun cuando se borren las fotos de los teléfonos celulares o las computadoras, toda esa información se queda almacenada en 'la nube' y puede ser un blanco fácil de robo.
