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jueves, 6 de septiembre de 2018

El “gen de la juventud” al descubierto

Por Amanda

La expresión del gen FoxM1, según un grupo de científicos pertenecientes a la Universidad de Oporto descubrió que posee un gran vínculo con el envejecimiento de las células de la dermis. El colectivo del Instituto para la Innovación y la Investigación en la rama de la Salud de la mencionada universidad, empleó en el progreso del proyecto células cutáneas en cultivo, administradas con el desarrollo de la expresión de dicho gen, el cual cuenta con tipologías opuestas a las del envejecimiento celuloso.

El análisis se procedió a través de fibroblastos, un conjunto de cultivos fundamentales de un tipo específico de células definidas de la dermis, expresó Elsa Logarinho, la líder de la investigación. “Para llevar a cabo dicho proyecto empleamos células vivas de los principales fibroblastos dérmicos que eran de individuos jóvenes, los cuales tenían media y avanzada edad, también está el caso de las células de enfermos con progeria, el cual es un extraño síndrome de envejecimiento prematuro en niños”, explicó la coordinadora de la investigación.

Después de examinar y relacionar los genes con la expresión trasformada de células de epidermis, el colectivo de investigadores ultimó que el gen FoxM1, el cual se encarga de inspeccionar el ingreso de la célula en fraccionamiento, se entiende ser un eslabón importante en el proceso de envejecimiento, declaró en un anunciado la Universidad de Oporto. En el trascurso de la vida las células, en particular las de la dermis, disipan la facultad de modificarse a causa de faltas genéticas y cromosómicas almacenados por particiones periódicas, puntualizó Logarinho. Con estos deslices y la imposibilidad de modificarlos logran que la célula, mediante los mecanismos de autocontrol, entre en una etapa sostenida y desista de rejuvenecer. El envejecimiento, incuestionable en la epidermis, es el resultado perceptible de este fallo de progreso.

Los especialistas comprobaron que, al agrandar la expresión del gen FoxM1 en un cultivo de células gastadas, las células que todavía conservan cierta facultad de fraccionarse, consiguen recuperar las tipologías de las células nuevas; esto reestablece errores y a su vez parte con mayor continuidad. “Este rejuvenecimiento sucede exclusivamente en células aún funcionales, no ocurre en aquellas que poseen excedente de errores almacenados”, señaló Logarinho. A pesar de estos efectos, los expertos conciben que el FoxM1 debe ser estimado y puesto en práctica para técnicas potenciales contra los indicios de la degeneración.