Google puede eliminar tu pasado criminal si se lo pides
Reza un viejísimo proverbio que no hay nada oculto bajo el sol. En la era digital, podríamos hacerle una leve modificación y decir que no hay nada oculto en Internet. Por ello muchas personas en el mundo luchan desde hace años por establecer el “derecho al olvido”, o sea, tener la posibilidad de borrar su huella dejada en la red y que es posible recuperar a través de los buscadores. Recientemente un empresario británico logró que un tribunal de este país fallara a su favor y obligara a Google a eliminar su pasado criminal del mega buscador. Le tomó solo diez años.
Hace una década este hombre de negocios fue condenado a seis meses de prisión por interceptar comunicaciones. Tras un largo proceso el juez MarkWarby se inclinó a su favor, sin embargo desestimó la demanda de un segundo hombre de negocios que había cumplido una condena de cuatro años por cargos más graves. Como argumento a las dos decisiones diferentes el juez alegó que uno de los demandantes había continuado engañando al público, mientras que el otro había mostrado arrepentimiento. Bastante subjetivo el parlamento del juez Warby, ¿pero no lo es en sí el concepto de justicia?
Ambos habían solicitado a la mega compañía de Internet que eliminara los resultados relacionados con sus condenas, así como los artículos de noticias relacionados, alegando que ya no tenían relevancia. Cuando Google se negó a eliminarlos entonces la llevaron a juicio.
Desde 2014 la Corte de Justicia de la Unión Europea estableció el derecho a ser olvidado, tras el caso del español Mario Costeja González, quien solicitó a Google que suprimiera datos de su historial financiero. Hasta la fecha la compañía afirma que ha eliminado más de 80 000 páginas de resultados a partir de la exigencia de este derecho por los usuarios, sin embargo, puede negarse a hacerlo si sus motores de búsqueda determinan que las páginas son de interés público.
Sobre este último fallo, google afirmó que trabaja muy duro para respetar el derecho de los usuarios a borrar ciertas huellas digitales…siempre y cuando no estén asociados a resultados de búsquedas de interés público.
El derecho al olvido está pensado para ser aplicado en aquellos casos en que la información online ya no es relevante, pero puede tener un impacto desproporcionado sobre una persona.
Para la organización sin ánimos de lucro Open RightsGroup, esta sentencia sobre todo sienta un precedente legal y las cortes deberán valorar cuidadosamente el derecho de las personas a acceder a sus registros históricos sin que esto cause perjuicio al interés público y la libre circulación y acceso de información en Internet, uno de los pilares sobre los que fue concebida la red de redes.