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miércoles, 27 de junio de 2018

Nueva York aboga por la legalización de la marihuana

Por Amanda

En la ciudad de Nueva York, los arrestos por consumo y tenencia de marihuana se encuentran a muy poco de ser algo de tiempos remotos. Bill de Blasio, el alcalde ha dado un plazo de tan solo mes a su Departamento de Policía (NYPD) para que se modifique las maneras que persigue al contener a quienes aspiren cannabis en áreas públicas. El cambio se comunica posteriormente de que los índices registrados en las investigaciones que se llevaron a cabo referente a este asunto mostraran una evidente discriminación racial en los arrestos ocurridos.

La NYPD efectuó el año anterior más de 10.000 detenciones referentes con el consumo o la tenencia de marihuana. Es una cantidad más baja en comparación con las 60.190 detenciones que tuvieron lugar en el año 2000, en generosa orden porque desde hace tres años se difunden avisos (multas) que no afectan para nada en los antecedentes penales de dichos individuos. Esto Trajo consigo una disminución de un 40% las detenciones a lo largo de toda la ciudad cuando se relacionan con las sumas del año 2013. Pero ciertos análisis realizados muestran que el 86% de los arrestados son procedentes de países latinos o negros. Esto quiere decir que las personas de color adquieren ocho veces más probabilidades de ser arrestados que una persona blanca, pues el nivel de consumo es paralelo. James O´Neill. El comisario jefe de la NYPD, se rehúsa a afirmar que sus policías procedan ejerciendo un “modelo racial”, aunque sí acepta que se deben inspeccionar los métodos de trabajo de los mismos.

El objetivo, declaró, es reunir el trabajo policial en los asuntos que constituyan un peligro para la seguridad ciudadana, y lograr de la misma forma un procedimiento que sea equilibrado con los valores de justicia, para fortalecer la “seguridad” de la sociedad hacia el trabajo de los oficiales. “Tenemos que ponerle un final a los arrestos infundados y a la diferencia en la manera que se llevan a cabo las leyes”, añadió el alcalde. “Esta desacuerdo es insoportable”, manifiesta el reverendo Al Sharpton, “debe terminar”. El encuentro sobre el trabajo policial ocurre mientras el Estado de Nueva York logra resolver y legitimar la marihuana. Cyrus Vance y Eric González, los fiscales del distrito de Manhattan y de Brooklyn, respectivamente informaron de igual forma que desde el mes de agosto no sentenciarán a la mayoría de las personas detenidas por consumir marihuana.

“El doble trabajo de la departamento del fiscal”, destaca Vance, “es una ciudad protegida y posee un sistema judicial más equilibrado. Los procedimientos penales y los arrestos, la gran mayoría realizadas contra hispanos y negros no valen a estos propósitos”. González amplía que es necesario hacer más para prometer un sistema justo. Pero del mismo modo destaca que se debe constituir una fila de irregularidades relacionados con lo que respecta a la seguridad. Andrew Cuomo, el gobernador de Nueva York, pretende formar un colectivo que investiga y a su vez analice los provechos de la legalización de la marihuana. Conjuntamente, se deduce que podrían contribuir más de 300 millones de dólares en entradas fiscales a la ciudad y otros más de 400 millones a lo que respecta al Estado.